Casa Goyo - Manzanares el Real, Madrid

maria garnacho alonso

La comida estaba bien, pero la experiencia ha sido horrible. Por fuera tiene muy buena pinta, pero el servicio ha sido pésimo. Un menú de 22euros que no puedes compartir, porque te obligan a pedir un menú por persona. Había tres platos que no tenían, del menú y de la carta. Nos traen el primer plato, frío, han tenido que llevárselo y nos lo han traído recalentado de microondas (o son muy hábiles y han puesto las albóndigas y las patatas en exactamente la misma posición, incluso la que había partido). El segundo plato ha tardado más de media hora en salir, y ha salido porque nos hemos levantado a pedirlo, porque el camarero que nos estaba atendiendo ni siquiera se ha dado cuenta (muy desagradable, llamando "jambas" a sus compañeras junto con otro cliente). El pan estaba duro, como si fuera descongelado del día anterior. Nos han dicho que, por las molestias, nos invitaban a una coca cola, a pesar de que les hemos dicho que no era necesario. Luego se ha acercado la dueña, a pedirnos disculpas y a que le explicásemos lo que había sucedido. Ella nos dice que nos invita al plato de albóndigas, pero la realidad es que nos han cobrado todo. El camarero, delante de la dueña, muy cortés y amable, pero por detrás muy maleducado. La única persona que merece la pena es la chica que nos ha buscado la mesa, que se ha dado cuenta de que nuestros platos tardaban muchísimo y se ha acercado a preguntar. Espero que le vaya muy bien. Por lo demás, un cero a todo.

Manuel Carbonero

Llegamos con prisas y poco tiempo y la experiencia fue maravillosa. Nos atendieron Sebastián y unas compañeras y el trato fue exquisito. Comimos a la carta callos, revuelto de setas y puntas de solomillo. Todo buenísimo pero las setas, espectaculares. Espacioso, limpio y muy bonito. Situado junto a la majestuosa Iglesia de Nuestra Señora de las Nieves y muy cerca del impresionante Castillo de los Mendoza. Absolutamente recomendable en calidad y precio. Pet friendly!

Cristina

Fuimos por un aperitivo y estuvimos a gusto! Estaba bastante lleno el lugar! Y los platos tenían buena pinta. Lo recomiendo

Mr. Rojas

Ha sido una desagradable experiencia. No había ni siquiera café.
Aunque la chica se mostraba amable, se nota que el dueño no está en lo suyo … indiferencia, desgana y conformismo.
No volvería

Ana De La Morena

Para no volver. Vamos cinco personas a tomar unas raciones. Pedimos que nos abran la sombrilla que hay al lado de nuestra mesa y nos dice la camarera que no puede porque está estropeada. Minutos más tarde va otra persona y ante nuestra sorpresa sube la sombrilla. Terminamos de comer, pedimos café y la misma camarera que nos dijo que no podía subir la sombrilla nos dice que no sirven cafés. Volvemos a sorprendernos cuando vemos pasar una bandeja con cafés. Por lo tanto, tengo que valorar el servicio como pésimo.

Mario V.

La comida estaba bien de sabor, algo fría eso sí. Tardaron mucho en servir, tanto primer como segundo plato y con confusiones a pesar de haber tomado la nota correctamente. Cuando pedimos Té y cafés bien, tras tardar en traerlo cuando llega con los cafés dice que no tiene del té que se ha pedido. Si me avisas antes de lo que tienes, puedo cambiar y no volver a esperar 10 minutos a recibir otro té. No repetiría.

Luis González Conde

Es una pena. Está bien situado pero el servicio pésimo. Hemos visto a varios posibles clientes que han entrado y se han ido sin tomar nada. No tenían nada para picar. Dicen que de 17:00 a 19:00 no sé puede. Tampoco podían ponernos un café. Después vimos que había tortilla en la barra y les pedimos que nos pusieran un pincho y nos lo pusieron sin calentar. Normalmente calentar en un microondas y poner un café se puede hacer sin que esté abierta la cocina. También nos podían haber dicho que había tortilla. Si no la vemos, no nos la ponen.

Bernardo Calles

Pésimo servicio, y no solamente por parte de la camarera, únicamente obedece órdenes de los propietarios. Es una pena que una buena elaboración en la comida Se estropee por la mala atención. No se puede negar una sombrilla con la excusa de que no funciona y luego ponérsela a otro cliente. No se puede negar el servicio de café ni de cualquier otro producto, si dispones de ello solo por que estás saturado y has de seleccionar a quien le sirves en función de lo que se va a gastar. En definitiva la profesionalidad brilla por su ausencia. No volveré jamás. Y conste que soy del gremio.

En cuanto a su respuesta, no he valorado 2 veces, ha sido otro comensal de la misma mesa.

En cualquier caso, un responsable nunca culpa a sus empleados, máxime cuando usted me ha confirmado que solo sirven café a los clientes que han comido.